El énfasis tradicional de las fuerzas de orden público ha sido la detención de criminales. No obstante, la aparición de nuevas tecnologías, incluida la recopilación y el análisis de datos de fuentes abiertas, incluida las aplicaciones de inteligencia artificial (IA), ha marcado el inicio de una nueva era de oportunidades únicas que ayudan a los organismos de orden público a prevenir verdaderamente los delitos.
La IA se está utilizando cada vez más de manera exitosa por las fuerzas de orden público para medidas de prevención del delito de alto impacto. Las nuevas tecnologías permite que los organismos de orden público sobrecargados de trabajo y con poco personal recopilen, procesen, analicen y destaquen datos relevantes para los investigadores de cualquiera y todos los tipos de delitos. Esto incluye soluciones de IA para recopilar e interpretar conexiones y patrones en registros financieros, imágenes geoespaciales, fragmentos de cámaras de vigilancia, datos de redes sociales, registros públicos, feeds de noticias y muchas otras fuentes abiertas y de propiedad.
Una de las aplicaciones más útiles de la IA para prevenir y reducir el delito está en la asignación de recursos. Dado que prácticamente todos los organismos de orden público enfrentan los desafíos de la escasez de personal, y de fondos, el valor y la importancia de las asignaciones de recursos y los despliegues desempeña un rol vital en la prevención del delito. Los sofisticados algoritmos han probado de manera manifiesta tener un éxito rápido y de alto impacto en ayudar a las organizaciones de justicia penal a comprender mejor “quién, qué, cuándo, dónde, cómo y por qué” del delito en sus jurisdicciones. La IA puede determinar e identificar patrones relevantes de delito que pueden abordarse mejor a través del ajuste en las asignaciones de recursos, como el tiempo de las patrullas en vehículos de la policía, las patrullas a pie, los guardias de seguridad, las barreras físicas, las alarmas o los tiempos de respuesta de los servicios de emergencia y los funcionarios de respuesta en sitio. Los patrones pueden reflejar tendencias estacionales, geográficas o demográficas que se identifican de manera rápida a partir del análisis de inteligencia de todas las fuentes impulsado por la IA, de formas que no pueden obtenerse a partir de medios analíticos tradicionales.
Otra aplicación de la IA para la prevención del delito analiza los metadatos para explorar la eficacia de los esfuerzos de prevención del delito. Se han realizado distintas campañas en el mundo para combatir una variedad de actividades ilegales, incluidos delitos violentos graves y el tráfico de personas, drogas y armas de fuego. A partir del rango, alcance y mero número de programas de prevención del delito, determinar los esfuerzos que funcionan mejor es un desafío importante. La aplicación de algoritmos sofisticados y bien diseñados ha ayudado a los investigadores a atravesar estas montañas de datos para obtener indicios preciosos de utilidad e impacto de los distintos programas de prevención del delito. Este tipo de conocimientos es fundamental para aprovechar la IA para óptimas estrategias de prevención del delito.